Patrimonio:
El riquísimo patrimonio monumental, artístico y arqueológico del país es un reflejo de encuentros en el tiempo y en el espacio que aportan a la cultura portuguesa, características únicas en el mundo. En Portugal, entre centros históricos, lugares de interés arqueológico, monumentos, paisajes culturales y paisajes naturales hay trece lugares declarados por la UNESCO como Patrimonio de la Humanidad.
Aquí se sobreponen estilos e historia. Desde las pinturas rupestres al barroco tardío, de
las ciudades construidas por el hombre a los paisajes ofrecidos por la naturaleza,
todas ellas Patrimonio de la Humanidad. Paséese por los centros históricos de
las ciudades. En sus calles puede leer la historia de las culturas que la han habitado
y transformado. Descubra los vestigios del paso de celtas, romanos, visigodos y árabes
en la ciudades museo de Évora o los orígenes medievales del centro histórico de Oporto.
Visite los palacios, conventos e iglesias en el Casco Antiguo de Angra do Heroísmo, en la Isla Terceira, en las Azores y deslúmbrese con el castillo de Guimarães y el Casco Antiguo de esta ciudad donde nació Portugal. Del encuentro con otras culturas y el dominio de los mares, en la época de los Descubrimientos, nació el arte Manuelino. El Convento de Cristo en Tomar, cuya arquitectura presenta trazos que van del Románico al estilo Manierista, fue fundado en 1162 y, siglos más tarde, fue sede de la Orden de Cristo. Observe con detalle la famosa ventana y maravíllese con el ábside En el Monasterio de Alcobaça, una de las más importantes abadías de la orden de Cister, sobresale la grandiosidad del gótico. En uno de los monumentos más fascinantes de Europa, el Monasterio de Batalha, deslúmbrese con el detalle del tallado de la piedra y oiga los secretos que este espacio revela. Ya en Lisboa, la Torre de Belém marca el apogeo del arte portugués en el siglo de los Descubrimientos y se alza simbólicamente en el punto de partida de las naves y carabelas. El Monasterio de los Jerónimos que constituye el conjunto monástico del siglo XVI más notable en Portugal, está considerado por muchos el máximo exponente del estilo Manuelino. Sintra es uno de esos lugares repletos de magia y misterio donde la naturaleza y la cultura se han conjugado en un paisaje cultural de simbiosis perfecta. La Corte y los nobles han ido alzando a lo largo de la sierra suntuosas fincas y palacetes rodeados de jardines y parques. En el Alto Duero Viñatero, la larga tradición de viticultura ha modelado un paisaje de belleza excepcional que, bañado por el río Duero, produce vino desde que existe memoria y aquí es donde se elabora el célebre vino de Oporto. En las Azores, en la isla de Pico, los caprichos de la naturaleza y la voluntad del hombre han hecho del duro basalto y del suelo volcánico sorprendentes viñas, creando un paisaje de cultivo de la viña único en el mundo: el paisaje cultural de la viña de la isla del Pico. En la isla de Madeira, el bosque Laurisilva, prehistórico y exuberante, es una de las atracciones naturales de la isla. Recorra en el Valle del Côa una galería de arte con 25.000 años y descubra en este espacio único en el mundo el mayor conjunto de figuraciones paleolíticas al aire libre hasta hoy conocidas. Son diecisiete kilómetros de arte a cielo abierto que muestran el genio creador de nuestros antepasados, del Paleolítico Superior a la Edad de Hierro, en un viaje en el tiempo a los orígenes de la historia de la humanidad.
Monasterio de Jerónimos, Lisboa
El Monasterio de los Jerónimos de Santa María de Belém, se ubica en el barrio de Belém, Lisboa.
El estilo manuelino se caracteriza por la mezcla de motivos arquitectónicos y decorativos del gótico tardío y del renacimiento.
Este monasterio, al igual que la cercana Torre de Belém y el Monumento a los Descubrimientos simboliza la Era de las exploraciones portuguesa y se cuenta entre las principales atracciones turísticas de Lisboa.
Palacio Ducal
Esta residencia recientemente restaurada de los Duques de Bragança tiene un estilo borgoñés con un toque gótico en contraste con los muchos castillos de influencia Musulmana y Normanda que se encuentran por todo el país. Construida en el siglo XV por Afonso, I Duque de Bragança, la espléndida mansión señorial fue abandonada cuando la familia cambió su base para Vila-Viçosa, hasta que fue restaurada durante la dictadura de Salazar. Hoy en día las principales salas del palacio, donde se encuentran piezas impresionantes de mobiliario Renacentistas, excepcionales tapeçarias Flamencas y alfombras Persas pueden ser visitadas. Actualmente es utilizada como una residencia oficial del Presidente de la República para recibir dignatarios extranjeros.
Castillo de Guimarães
La magnífica torre central cuadrada de este castillo, rodeada por otras ocho torres más pequeñas, domina el horizonte de la ciudad varios quilómetros a su alrededor. De hecho, fue construida en el siglo X para proteger la ciudad de ataques de los Moros y de los Normandos y fue más tarde aumentada como depósito de armas y palacio por Henrique de Borgoña. La leyenda dice que Afonso Henriques, primer rey de Portugal, nació aquí, a pesar de algunos historiadores afirmen que es oriundo de los alrededores de Viseu. Podemos visitar el castillo, restaurado, y la minúscula capilla romanica de San Miguel, donde fue, presuntamente, bautizado.
Bosque de Laurisilva, Madeira
La Laurisilva es un bosque indígena raro de gran importancia científica que es considerada actualmente Patrimonio Natural Mundial de la UNESCO desde diciembre de 1999.
El origen de este bosque se remonta al Terciario, momento en que se extendía por una vasta área del sur de Europa. Durante la última glaciación desapareció prácticamente de todo el continente Europeo. Actualmente, su distribución es reducida apenas a los archipiélagos de la Macaronesia, -Madeira, Açores, Canárias y Cabo Verde- y a algunos enclaves situados en el sur de la Península Ibérica y Marruecos. Madeira alberga la mayor extensión de este bosque que se encuentra en el mejor estado de conservación. Cubre aproximadamente 22 por ciento del área total de la isla.
Ábside del Convento de Cristo, Tomar, Lisboa Región
El Convento de Cristo, en Tomar, perteneció a la Orden del Temple y es uno de los principales monumentos de la arquitectura portuguesa.
Fundado en 1162 por el Gran Maestre del Temple en Portugal, don Gualdim Pais el Convento de Cristo aún conserva recuerdos de esos monjes caballeros y de sus herederos en su cargo, la Orden de Cristo, que hicieron de este edificio su sede.
Se trata de una construcción periurbana, implantada en lo alto de una elevación que domina la planicie donde se extiende la ciudad. Está circundado por las murallas del Castillo de Tomar.
Actualmente es un espacio cultural, turístico y aún devocional. La arquitectura contiene elementos románicos, góticos, manuelinos, renacentistas, manieristas y barrocos.
Viñas de la Isla de Pico, Azores
Famosa por sus vinos. A lo largo de la costa, un muro bajo protege los viñedos del mar y de los elementos para producir un vino de sabor único, producido por los suelos volcánicos. Durante el apogeo de la industria vinícola, el vino de Pico era muy apreciado en el mundo y se exportaba a varias casas reales. Hasta la segunda mitad del Siglo XIX, las industrias vinícola y pesquera constituían la mayor fuente de ingresos de sus habitantes. Cuando la pesca de ballenas paró en 1983 fue substituida por la pesca de atún y la industria de su tratamiento y que sigue siendo la mayor fuente de ingresos de la isla.
Cultura:
En Porto, vibrar con la orquesta, escuchar el piano y la emoción de los cantantes de jazz que van por la Casa de la Música. Prefieren la contemplación del arte moderno? Así Serralves es la apuesta segura! No se olvide de las salas de teatro en la ciudad, como el Rivoli o el Teatro Carlos Alberto, o asistir a un espectáculo en el Coliseo de Oporto. Siente también invitó a varios de los museos de la ciudad: Museo Soares dos Reis, el Museo del Tranvía y el Museo del Puerto son algunas sugerencias.
En Guimarães, Centro Cultural de Vila Flor, ofrece un programa cultural diverso, en Braga, Teatro Circo y en Famalicão, Casa das Artes. 'Ll También se sorprenderá con la programación del Teatro de Vila Real y el Centro de Arte Contemporáneo de Braganza. En Coimbra, puede tomar un paseo en la ciudad de los estudiantes y buscar el Teatro Académico Gil Vicente. Ya en Figueira da Foz, sorpréndase con la programación del Centro de las Artes y de rendimiento.
En Lisboa, el número de sitios y servicios culturales es notable. Sin embargo, hay puntos de parada, como el Centro Cultural de Belém y la Fundación Gulbenkian. Para un gran concierto, Campo Pequeno y el Pabellón Atlántico, no te defraudará. Pero hay mucho que aprender. No te pierdas sus monumentos, museos y palacios. Muy cerca del Palacio Nacional de Sintra y Mafra otros lugares por descubrir. Más al sur, en el Alentejo, recuerde estos nombres: Arena Coliseo d'Évora y Elvas. Los más pequeños podrán ser deslumbrados por el Museo del Juguete en el Museo de Évora o (a) jugar en Arronches.
En el Algarve, nos referimos al Teatro das Figuras, Faro, Casa das Artes de Portimão, y muchos espectáculos al aire libre dan vida a las noches de verano. En las Azores, le sugerimos una visita a la Micaelense Coliseo para asistir a un concierto o un musical. Salvo por la noche, ya que el día se puede visitar los museos o los monumentos de la isla donde está. Antes de saltar a, Madeira continente, hay un montón de sugerencias para él. Usted puede comenzar por el Museo del Vino de Madeira, y por la noche, ver un espectáculo en el casino.
Naturaleza:
Desde lo alto de las montañas del norte de las llanuras, el calor de las playas de las islas de vegetación exuberante, Portugal es un conjunto de lugares maravillosos para explorar y encantos. Alguna vez la tierra idílica de los exploradores, ahora tenemos la oportunidad de descubrirnos a nosotros mismos
No fue un accidente que no se han aventurado a través de mares desconocidos. La extensa línea costera del Atlántico siempre nos ha hecho soñar con el mar. De vez en cuando, acantilados y cabos, suave altiva y caprichos de la naturaleza como la Ría Formosa, los lagos de Santo André y Sancha Islas Berlengas o dar lugar a las áreas protegidas del paisaje y las especies de flora y fauna única en el mundo.
Si prefiere la frescura del verde, ir al interior. Visite la Peneda-Geres y el Valle del Guadiana y sentir la naturaleza en su estado más puro. Ver la nieve en la Serra da Estrela y tomar un crucero por el Duero Internacional, donde se rompe el silencio sólo por las aves de rapiña.
De los muchos parques naturales y áreas protegidas en Portugal, elija la Reserva Natural del Estuario del Sado para ver los delfines más. Una experiencia que puede replicarse en el Archipiélago de las Azores. Traiga binoculares para los Parques Nacionales de la Serra de Sao Mamede y Montesinho y ver águilas y zorros.
En Madeira, visita el Bosque de Laurisilva, Patrimonio de la Humanidad, un buen ejemplo de la forma en que los bosques subtropicales en los tiempos primitivos. Hablando de patrimonio, no se olvide el Paisaje Cultural de la isla de Pico en Viña.
Un jardín del tamaño del país a su disposición, donde se distingue cada región por características como muy natural.
Los mejores saltos de agua en el país
Es en los rincones más recónditos del país, que son los lugares más hermosos y sorprendentes cascadas más que haya visto jamás. Las esquinas son así, donde todavía gobierna la naturaleza, que nos permiten recuperarse del estrés del día a día. Siga con nosotros, entonces este tour de descubrimiento, de Trás-os-Montes a las Azores, a sabiendas de refugios de gran valor y belleza.
En el norte, específicamente en Montalegre en su totalidad el Parque Nacional de Peneda-Geres. Al llegar a la Cascada de Pitões Junia, que plagan nosotros un sentimiento de pequeñez, por la monumentalidad como: una cascada de unos treinta pies de altura. Después de esta primera gota de agua, lo siguen hasta varias otras más pequeñas, lo que permite un chapuzón en verano.
A pocos kilómetros de la Tierra Bouro, aún en el Geres, se encuentra la Cascada y Cascada Río Leonte arado. El primero se encuentra a una altitud de 872 metros, se estrelló hacia abajo y formando una hermosa cascada en el invierno y la primavera, mientras que el segundo se caracteriza por la precipitación de agua en pasos consecutivos. La siguiente parada es en Mondim de Basto, una zona de acantilados. Aquí podemos vislumbrar la magnífica cascada del garfio Ermelo, también conocido como "Cañón del río Olo, una espectacular cascada con un centenar de metros de altura, construido en el Parque Natural de la autenticidad. Un paisaje que nos hipnotiza con su grandeza y la belleza. En el distrito de Aveiro encontrar dos cascadas vale la pena visitar: la Mizarela Frecha en Arouca, cayendo a unos 60 metros de la cima de la montaña Freita, y la Cascada de Cabrera, en Sever do Vouga, que se estrella a 800 metros de altura en las colinas de Arestal.
En Seia, donde el taladro Bueno es rey y señor en el verano. Una gota de agua de pequeñas dimensiones, pero que fascina por su belleza y tranquilidad del lugar.
En Arganil recomendamos una visita a la Fraga da Pena, situado en la zona de paisaje protegido de la Serra do Azor. Aquí, las aguas del Degraínhas barroco que se encuentran una diferencia de más de veinte pies, formando una cascada y un estanque. El paisaje es realmente sorprendente, con la vegetación para ocultar la pizarra, resultado del microclima que existe aquí. En el sur no es raro encontrar impresionantes cascadas que sí, pero como la excepción confirma la regla, en Mértola y Serpa se encuentran el Pulo do Lobo, una zona donde el río Guadiana se estrecha, provocando la formación de rápidos y cascadas.
Las Azores son por excelencia la tierra de cascadas y saltos de agua.
Gracias a su clima húmedo durante todo el archipiélago de venir a través de impresionantes paisajes exuberantes, guiados por la cascada de los ríos en los acantilados. Éstos son algunos de los nombres para recordar: Cascada de Foz de Ribeira Grande (Ilha de Santa María), Cascada de Ribeira dos calderas, la cascada de Ribeira del Fuego y Caldeira Velha (Isla de São Miguel), Cascada de Ribeira Grande, Laguna de los Patos y el Pool de bacalao (Isla de Flores). Creemos que una visita a cualquiera de estos lugares es suficiente para justificar el viaje. Y si te apetece dar un pequeño salto a Madeira, saber que no se pierda los lugares por descubrir. La cascada de Nueva Levada da Ponta do Sol, que se derrama en un estanque de agua clara, hasta el 25 de las Termas de cascada, rodeada por un denso y suave, pasando por el famoso velo de la novia, una cascada que fluye por la pendiente más adelante, justo al lado del mar.
Parques nacionales:
La Sierra de la Estrella
La Sierra de la Estrella, o Serra da Estrela es un parque natural, un espacio protegido a casi 2000 metros de altura donde encontramos una diversidad natural destacada, y un paisaje precioso y lleno de numerosas posibilidades de practicar de todo tipo de deportes al aire libre.
El Parque Natural de Sierra de la Estrella posee una extensión de más de 1000 kilómetros cuadrados, y está enclavado dentro de los distritos de Guarda y de Castelo Branco. Las ciudades más importantes que encontramos en esta región son las de Covilha, Seia y la de Guarda.
La composición de este Parque Natural está muy supeditada al granito, así como al hielo y a los antiguos glaciares, o a sus lagunas de agua dulce.
Covilha, Puerta a la Serra de la Estrella
Serra do Acor, Patrimonio Natural de Portugal
La Sierra do Açor, nos deslumbra desde lo alto de sus 1349 metros. Los bancales escalonados, el agua discurriendo por canales de riego y el impresionante bosque de "maragaza", clasificado como reserva biogenética, convierten la sierra en un lugar diferente.
Bosque Nacional de Bussaco, en el Centro Portugués
La Mata Nacional do Bussaco es un bosque espeso en el que se encuentran plantadas numerosas especies de árboles procedentes de todo el mundo, cedros, abetos, acacias, laureles, etc. En sus orígenes era propiedad de D. João Manuel, Obispo de Coimbra, posteriormente todo el patrimonio botánico fue enriquecido de forma significativa por las distintas generaciones de monjes Carmelitas Descalços que vivieron en este lugar entre los años 1630 y 1834. En sus alrededores también se encuentra una antigua residencia de reyes reconvertida en el Hotel Palace do Bussaco, considerado uno de los hoteles más hermosos de Europa.
Naturaleza en El Parque Nacional de Peneda- Geres
El Parque Nacional de Peneda-Gerês, en (portugués) Parque Nacional da Peneda-Gerês), conocido también por Gerês es el único parque nacional de Portugal (si bien hay numerosos parques naturales, paisajes y reservas protegidos por todo el país). Está situado en la región Norte al noroeste de Portugal.
El parque se creó el 8 de mayo de 1971 debido a su interés científico nacional e internacional, con objeto de proteger el suelo, el agua, la flora, la fauna y el paisaje y preservar al mismo tiempo su valor para los recursos naturales y humanos existentes. Otros objetivos del parque son el turismo y la educación.
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